El jardín "Virgen de Schoenstatt" celebra su aniversario el 18 de octubre. Después de haber participado ayer en la peregrinación anual, organizó hoy sus olimpiadas.
sábado, 19 de octubre de 2013
viernes, 18 de octubre de 2013
18 de octubre
En la mañana del 18 de octubre se hizo la peregrinación anual al santuario. Hubo mas que 800 personas participando en las peregrinaciones del ovalo papal y de Madre de Cristo en La Esperanza. Muchos participantes eran niños de los colegios, que reciben a la Virgen Peregrina.
A las 7 de la noche la familia de Schoenstatt celebró el inicio del año jubilar de los 100 años de la alianza de amor en Schoenstatt. 11 niñas hicieron su alianza y con nuestro "capital de gracias"(oraciones y regalos espirituales) se encendió el mundo (un globo de fierro recién hecho). Regalamos a la Virgen 100 rosas, una por cada año. La familia de Schoenstatt está feliz de vivir este año jubilar. En este año visitando cualquiera de los santuarios de Schoenstatt, se puede ganar una indulgencia plenaria.
Mensaje para la apertura del año jubilar
Mensaje para la apertura del Año Jubilar
¡Querida Familia de Schoenstatt!
En la sencilla celebración del 22 de septiembre los
pallotinos le transfirieron a la Familia de Schoenstatt la responsabilidad del
Santuario Original. El “Acta de Fundación” de nuestro Padre Fundador ha sido
escrita de nuevo con la tinta de nuestra vida y nuestra fe. Fue una hora de
profunda gratitud y de alegría interior. “Ha llegado el momento”, dijo el
provincial de los pallotinos, Padre Scharler , en su plática. De sus manos
recibí la llave. Esto lo hice en nombre de todos ustedes y con humildad, ya que
¿Quién puede decir que es digno de asumir la responsabilidad del Santuario
Original? Durante la última década hemos madurado como Familia. El amor de la
MTA nos ha formado hacia una mayor integridad y fraternidad entre comunidades,
estructuras y naciones. Su amor nos ha hecho madurar hacia un nuevo espíritu
misionero en nuestro servicio a la Iglesia. Así podemos acercarnos lentamente
al umbral del santuario. La hora de gracias de la entrega del Santuario nos
invita a detenernos un momento y preguntarnos si aún falta algo en nuestra
preparación interior, si la misericordia de Dios debe aún complementarnos, ahí
donde el amor de nuestras alianzas ha sido poco decisivo. Queremos seguir
magnánimamente las inspiraciones del Espíritu Santo. La Madre y Reina nos ha
amado primero a través de esta donación. Ha salido a nuestro encuentro con su
regalo jubilar para toda la Familia. No quiere más que despertar en nosotros un
amor y generosidad desinteresados para que el 18.10.2014 irrumpa nuevamente el
primer amor, un amor al Dios Trino, a cada miembro de nuestra Familia y a la
Iglesia. Este es el gran motivo, abrirse a la gran peregrinación, para estar
junto al Santuario y en Roma en el 2014.
Cuatro razones para la
participación son para mi evidentes.
+ María me espera
María me dice, como uno escucha a menudo en Latinoamérica:
“mi casa es su casa”. Si la gente es así de acogedora, María lo es mil veces
más. Ella me invita a su casa para 2 encontrarse personalmente conmigo el día
de suJubileo. El 18.10 tal vez solo tenga 3 minutos para poder mirarla pero, en
un día como ese solo basta un parpadeo. Se producirán transformaciones,
pequeños y grandes milagros y por eso quiero estar ahí. María anhela mi
presencia y la tuya.
+ Estar en el Lugar Santo
Para mi es inolvidable un domingo de ramos que pude vivir en
Jerusalén. Es una gracia especial poder estar en el Lugar Santo el día de la
conmemoración y la renovación. De esto uno puede vivir mucho tiempo. Me acuerdo
de los cientos de miles que peregrinaron por horas en la Basílica de San Pedro
hacia el féretro del Papa Juan Pablo II. Esto es distinto a visitar su tumba
cualquier otro día. Yo quiero estar junto al Santuario. Quiero preparar mi
agradecimiento en la larga fila delante del Santuario y preparar mi corazón
para la entrega.
+ Pertenecer a la Familia
Cuando uno se casa todos los amigos están presentes. Uno
mueve citas, hace largos viajes, porque uno pertenece ahí y no se lo quiere
perder. Yo quiero pertenecer ahí, cuando vengan los peregrinos desde todos los
rincones del mundo, cuyo idioma no entiendo, pero sus ojos brillantes me
asegurarán: somos un corazón y una alma,
como si nos conociésemos desde siempre. Somos una gran familia a la cual pertenecemos
juntos y nos necesitamos mutuamente.
+ Mostrar al Santo Padre la solidaridad
Con sus gestos y con sus sencillas y sinceras palabras él
nos ha hecho tomar conciencia. Ha despertado en muchos la alegría de ser
cristiano hoy. Nos pide salir de nosotros mismos, buscar a la gente e ir hacia
aquellos en la periferia de la sociedad. Él mismo va valiente hacia ellos. Yo
quiero vivir en esta corriente de la Iglesia y hacer mi aporte. Por amor a la
Iglesia quiero apoyar al Papa en Roma. Seguro que ustedes tienen otros motivos que
mueven su corazón hacia el camino de
peregrinación. Los invito a escribir sus razones al Team 2014. La vida se
enciende con vida. Así la ilusión será más grande y profunda y algunos indecisos
puede que se pongan también en camino.
Muy bienvenidos, mi casa es su casa, Su Heinrich Walter (Presidente general de Schoenstatt)
E-‐Mail: motivation@schoenstatt2014.org
Indulgencia en el año jubilar en el santuario
Indulgencia Plenaria en los Santuarios de
Schoenstatt
Del 18 de Octubre de 2013 al 26 de Octubre de 2014
Con motivo de los 100 años de su Fundación
El Santo
Padre, ha otorgado indulgencia plenaria, con motivo del centenario de la
Fundación del Movimiento de Schoenstatt, con la Primera Alianza de Amor con
María, a todos los Santuarios de Schoenstatt en el mundo, durante el año
jubilar, para todos aquellos peregrinos que cumplan con los requisitos habituales
establecidos.
¿Qué es una indulgencia plenaria?
Es un
“indulto”, una remisión, de la responsabilidad que tenemos de reparar los daños
que han ocasionado los pecados que ya nos han sido perdonados en la confesión
sacramental. En la Confesión se nos perdona la culpa que contraemos con los
pecados, pero es de justicia reparar también el daño causado por estos;
purificar las consecuencias de esos pecados. Si al morir, no se ha purificado
el corazón y no se ha expiado o reparado suficientemente el mal ocasionado, hay
que pasar el Purgatorio (para purificarse), antes de ver cara a cara a Dios.
El perdón,
Dios lo da gratis en cada confesión y espera un cambio real en la vida de la
persona. Al confesarse se supone también
que la persona está dispuesta a ¨reparar¨ o componer aquello que ha dañado con
su pecado. Como esto muchas veces no es posible, pues es difícil reparar el
daño cometido, entonces el pecado aunque ya esté perdonado en la confesión,
deja como una mancha, que habrá que limpiar en esta vida con obras buenas o en
el Purgatorio, para poder entrar totalmente en paz y con un corazón limpio al
cielo.
Para entender esto mejor,
podemos usar un ejemplo muy sencillo: el pecado es como un clavo que penetra
en la madera. La confesión saca el clavo, pero deja un agujero en la madera.
La indulgencia es como la masilla que tapa el agujero y deja la madera como
nueva.
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Esto
significa que si se recibe la INDULGENCIA PLENARIA (de todas
tus culpas) se estará como recién bautizado, con el alma y corazón plenamente
limpios de toda culpa pena. Si alguien muere acabando de recibir la
indulgencia plenaria, se irá al cielo directo, sin hacer “escala” en el
Purgatorio. ¡Borrón y cuenta nueva!
Es muy
importante reflexionar: esto solo es posible porque la MISERICORDIA de Dios
es infinita y porque su AMOR hacia nosotros también es infinito y no porque lo
ganemos por méritos propios.
En su
misericordia y para nuestra salvación, Dios le concedió a la Iglesia el
“poder de llaves” (cfr. Mt. 16,19;
esta expresión se deriva de las palabras de Cristo a San Pedro, confiriéndole el poder de “atar y desatar” en la Iglesia). Es por ello
que la Iglesia puede ofrecer esta posibilidad de conversión y purificación
total en tiempos y ocasiones especiales. La indulgencia quiere ser un incentivo a la
conversión y a la renovación de la vida de fe, en un tiempo de gracias, como
es un jubileo. Acogemos, por lo tanto, este privilegio que nos otorga nuestra
Iglesia, con una actitud de fe y confianza en la misericordia de Dios, que
busca motivarnos y ayudarnos a que nos convirtamos constantemente a Él.
Naturalmente, esto no
contradice ni disminuye en nada nuestra fe en la realidad del Santuario y en
las gracias que recibimos constantemente en él. Justamente, esperamos que con
el ofrecimiento de la indulgencia plenaria durante el año jubilar, se
incremente la vinculación a nuestros Santuarios y se experimenten con más
fuerza, como lugares de gracia y conversión.
¿Qué
cosa no es una Indulgencia?
A fin de facilitar la explicación, puede ser provechoso afirmar lo
que NO es una indulgencia. No es un permiso para pecar, ni un perdón para
pecados futuros: ninguna de estas dos cosas pueden ser concedidas por poder
alguno. No es una excepción que exima de alguna ley o precepto, ni mucho
menos de una obligación contraída por algún pecado, como por ejemplo, la
restitución de la cosa robada; al contrario, significa una satisfacción más
completa de la deuda que el pecador tiene ante Dios. No confiere ninguna
inmunidad con respecto a posibles tentaciones. Y de ninguna manera la
indulgencia puede entenderse como la compra del perdón de los pecados, que
aseguraría la salvación al comprador o la salida de alguien del Purgatorio
¿Cómo ganar la indulgencia plenaria?
Para ganar la
indulgencia plenaria durante el año jubilar 2014, hay que peregrinar a algún Santuario de
Schoenstatt y se deben cumplir tres
tipos de requisitos:
1. Sacramentales:
a)
La Confesión: Puede
hacerse una semana antes o el mismo día, o bien, dos semanas después, si se
está en gracia el día en que se obtiene la indulgencia.
b)
Participar en la Eucaristía y
comulgar. Esto debe llevarse a cabo el mismo día en que quiera ganarse la
indulgencia.
2. Requisitos de oración
a) Oración por las intenciones del Papa
rezando un Padrenuestro, un Avemaría
b) Oración del Credo
Todo esto
rezarlo con la intención de obtener la indulgencia.
3) Adicionalmente se recomienda una
acción de Amor al Prójimo
Realizar alguna buena acción de caridad, por
ejemplo visitar a un enfermo, ayudar a alguien necesitado, etc…
¿Quiénes pueden obtener las
Indulgencias Plenarias?
Cualquiera
persona que cumpla los requisitos. Puede obtenerla para sí mismo, o para un
difunto que crea que pueda necesitarla. No se puede aplicar o dedicar a una
persona que esté viva.
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jueves, 17 de octubre de 2013
Indulgencia Plenaria en el año jubilar en todos los santuarios de Schoenstatt
PENITENCIARÍA APOSTÓLICA
DECRETO
El Sumo Pontífice, Francisco, informado por el Revmo. Heinrich Walter, Superior General del Instituto de los Padres de Schoenstatt y Presidente de la Presidencia General de la Obra Internacional de Schoenstatt, sobre las celebraciones jubilares con las que se conmemora el centésimo aniversario del día en que el Siervo de Dios Joseph Kentenich – en ese momento sacerdote de la Sociedad del Apostolado Católico – impulsado por la renovación de la vida religiosa, fundó en Schoenstatt, cerca del pueblo de Vallendar, la Obra mencionada anteriormente. Esto se produjo a través de un acto de consagración, una alianza de amor con María bajo el título de Madre Tres Veces Admirable, Reina y Victoriosa.
Deseoso de hacer partícipes a los piadosos fieles del don divino, impulsado por su amabilísima solicitud por la Iglesia universal y por su particular afecto a los miembros de la Obra Internacional de Schoenstatt , el Sumo Pontífice benignamente concede la indulgencia plenaria que se ganará con las acostumbradas condiciones (confesión, comunión eucarística y oración por las intenciones del Sumo Pontífice), a todos los miembros de la Obra de Schoenstatt y a otros fieles Cristianos que estén celebrando el jubileo, sinceramente arrepentidos, unidos de corazón a las finalidades espirituales del Año de la Fe. Esta Indulgencia plenaria podrá ser obtenida desde el 18 de octubre (2013) hasta el 26 de octubre de 2014 por cuantos participen en algunas de las celebraciones del Año Jubilar o realicen algún piadoso ejercicio o al menos dediquen un adecuado espacio de tiempo a piadosas meditaciones concluidas con la oración del Padre Nuestro, con el Credo, y con invocaciones a la Madre Tres Veces Admirable, Reina y Victoriosa. Estas
acciones pueden realizarse en cualquier día en Schoenstatt, en ciertas celebraciones a ser
determinadas en la ciudad de Roma y en todos los santuarios de Schoenstatt del mundo.
Aquellos miembros de la Obra de Schoenstatt que, por enfermedad o por otras
graves causas, están impedidos para participar en las celebraciones jubilares, pueden, en
el mismo lugar en que se ven impedidos, obtener la Indulgencia Plenaria, a condición de
un profundo desapego de todo pecado y el propósito de cumplir, apenas sea posible, las
acostumbradas tres condiciones exigidas, así como unirse espiritualmente a los sagrados
ritos, rezando y ofreciendo los propios sufrimientos o limitaciones a Dios misericordioso
por medio de María.
Con el fin de que la consecución de la indulgencia divina confiada al poder de abrir
y cerrar de la Iglesia, sea de más fácil actuación para los operadores de la caridad
pastoral, esta Penitenciaría con ardiente premura ruega a los Padres y Sacerdotes de
Schoenstatt que se presten, con pronto y generoso ánimo, a la celebración de la
Penitencia y a la fuente de administración de la Sagrada Comunión a los enfermos.
Válido desde ahora para todo el Año Jubilar, no obstante cualquier disposición en
contrario.
Dado en Roma en la sede de la Penitenciaría Apostólica, el 2 de octubre del año 2013.
(gez.) Kardinal Mauro Piacenza
Großpönitentiar
(gez.) Msgr. Krzysztof Nykiel
Regent
DECRETO
El Sumo Pontífice, Francisco, informado por el Revmo. Heinrich Walter, Superior General del Instituto de los Padres de Schoenstatt y Presidente de la Presidencia General de la Obra Internacional de Schoenstatt, sobre las celebraciones jubilares con las que se conmemora el centésimo aniversario del día en que el Siervo de Dios Joseph Kentenich – en ese momento sacerdote de la Sociedad del Apostolado Católico – impulsado por la renovación de la vida religiosa, fundó en Schoenstatt, cerca del pueblo de Vallendar, la Obra mencionada anteriormente. Esto se produjo a través de un acto de consagración, una alianza de amor con María bajo el título de Madre Tres Veces Admirable, Reina y Victoriosa.
Deseoso de hacer partícipes a los piadosos fieles del don divino, impulsado por su amabilísima solicitud por la Iglesia universal y por su particular afecto a los miembros de la Obra Internacional de Schoenstatt , el Sumo Pontífice benignamente concede la indulgencia plenaria que se ganará con las acostumbradas condiciones (confesión, comunión eucarística y oración por las intenciones del Sumo Pontífice), a todos los miembros de la Obra de Schoenstatt y a otros fieles Cristianos que estén celebrando el jubileo, sinceramente arrepentidos, unidos de corazón a las finalidades espirituales del Año de la Fe. Esta Indulgencia plenaria podrá ser obtenida desde el 18 de octubre (2013) hasta el 26 de octubre de 2014 por cuantos participen en algunas de las celebraciones del Año Jubilar o realicen algún piadoso ejercicio o al menos dediquen un adecuado espacio de tiempo a piadosas meditaciones concluidas con la oración del Padre Nuestro, con el Credo, y con invocaciones a la Madre Tres Veces Admirable, Reina y Victoriosa. Estas
acciones pueden realizarse en cualquier día en Schoenstatt, en ciertas celebraciones a ser
determinadas en la ciudad de Roma y en todos los santuarios de Schoenstatt del mundo.
Aquellos miembros de la Obra de Schoenstatt que, por enfermedad o por otras
graves causas, están impedidos para participar en las celebraciones jubilares, pueden, en
el mismo lugar en que se ven impedidos, obtener la Indulgencia Plenaria, a condición de
un profundo desapego de todo pecado y el propósito de cumplir, apenas sea posible, las
acostumbradas tres condiciones exigidas, así como unirse espiritualmente a los sagrados
ritos, rezando y ofreciendo los propios sufrimientos o limitaciones a Dios misericordioso
por medio de María.
Con el fin de que la consecución de la indulgencia divina confiada al poder de abrir
y cerrar de la Iglesia, sea de más fácil actuación para los operadores de la caridad
pastoral, esta Penitenciaría con ardiente premura ruega a los Padres y Sacerdotes de
Schoenstatt que se presten, con pronto y generoso ánimo, a la celebración de la
Penitencia y a la fuente de administración de la Sagrada Comunión a los enfermos.
Válido desde ahora para todo el Año Jubilar, no obstante cualquier disposición en
contrario.
Dado en Roma en la sede de la Penitenciaría Apostólica, el 2 de octubre del año 2013.
(gez.) Kardinal Mauro Piacenza
Großpönitentiar
(gez.) Msgr. Krzysztof Nykiel
Regent
lunes, 14 de octubre de 2013
Jornada Nacional
En Lima se celebró la jornada nacional de la familia de Schoenstatt del 12 al 13 de octubre. Nos estamos preparando para el año jubilar. De Trujillo participaron 7. Aquí en peregrinación al santuario de Lima.
Credo Schoenstattiano
En la Jornada Nacional trabajamos el siguiente texto:
Nuestro Credo Schoenstattiano
1. Creemos que Schoenstatt surge como una irrupción de gracias en el seno de la Iglesia Católica el 18 de octubre de 1914. Que la providencia condujo al Padre José Kentenich a sellar ese día una alianza con María en el valle de Schoenstatt, constituyéndolo así en padre y fundador de nuestra Familia.
2. Creemos que nutriéndose de las napas profundas del Evangelio e inspirándose en los signos de los tiempos, las voces del alma y la resultante histórica, el Fundador anheló la formación, tanto en sus propias filas como en la sociedad, de un hombre nuevo en una comunidad nueva.
3. Creemos que el Santuario es el origen, fuente de gracia y de comunión de los hermanos en Schoenstatt. Allí sellamos la Alianza de Amor con María, la Madre, Reina y Victoriosa tres veces Admirable de Schoenstatt. Alrededor de él se reúne la Familia, crece nuestro sentido de pertenencia espiritual y conciencia misionera.
4. Creemos que debemos dar testimonio del lugar que María ocupa en el plan de salvación y de su misión en el tiempo actual: ella es la permanente compañera y colaboradora de Cristo en toda su obra de redención. La Mater tiene el oficio y encargo de ser imagen sublime y educadora materna del hombre nuevo y la comunidad nueva en Cristo.
5. Creemos que estamos llamados a aspirar a la santidad del día de trabajo. Queremos hacerlo mediante el fiel cumplimiento del deber de estado y por una respuesta generosa a los deseos del Padre.
6. Creemos que Cristo es el rostro de Dios Padre vuelto hacia el mundo y el Cordero victorioso que intercede por nosotros. Como miembros suyos, somos hijos en el Hijo y hermanos entre nosotros. En él y con él queremos amar y servir a la Iglesia para la vida del mundo.
6. Creemos que Cristo es el rostro de Dios Padre vuelto hacia el mundo y el Cordero victorioso que intercede por nosotros. Como miembros suyos, somos hijos en el Hijo y hermanos entre nosotros. En él y con él queremos amar y servir a la Iglesia para la vida del mundo.
7. Creemos que Dios nos permite reconocer su voluntad en los acontecimientos de la vida y la historia, en las voces del alma, en la estructura de ser de la creación y en los hombres. En libertad, Él nos invita por la fe práctica en la divina Providencia a hacer nuestros sus planes.
8. Creemos que Dios nos manifestó su paternidad y orientación en el Padre Fundador. En él hallamos el norte y el carisma que Schoenstatt quiere encarnar. Con alegría confesamos nuestra adhesión filial a él: “Padre, nuestro corazón en tu corazón, nuestro pensamiento en tu pensamiento, nuestra mano en tu mano”.
9. Creemos estar llamados a amar fraternalmente con fidelidad y respeto, a tomar iniciativas y cultivar la confianza y el perdón. Queremos que nuestra condición de familia se exprese en acogimiento cordial, el servicio abnegado y la corresponsabilidad. Guardamos silencio ante las faltas de los otros y sustentamos nuestra comunión por la oración y el deseo de asociarnos y complementarnos. El fin es ser “Con María, Familia del Padre”.
10. Creemos que el legado del Fundador, “Alegres por la esperanza y seguros de la victoria vamos con María hacia los tiempos más nuevos”, nos invita a nosotros -débiles instrumentos- a mirar con gratitud y compromiso el don y la tarea recibida. Schoenstatt para la Iglesia, la Iglesia para el mundo, el mundo para la Santísima Trinidad.
P. Guillermo Carmona
jueves, 10 de octubre de 2013
6 de octubre: Jornada: Historia de Schoenstatt/Trujillo
Resumen de la historia del Movimiento
de Schoenstatt en Trujillo
23.11.84: Fundación con la Hna Liberata y Señoras.
1985: Adriana
Cáceres y Alicia de Lastreto viajan a Alemania ( 100 años del padre Kentenich)
86-88: visitas del
Padre Carlos Pfeiffer
87: Cesar y
Victoria Medina viajan a un encuentro en Argentina. Se forma la “asociación
obra familiar mariana de
Schoenstatt”
88: Nace la
juventud masculina y femenina con Kike Diaz y Cecilia y Roció Medina.
18.6.90 Bendición de la
Ermita en San Andrés. Empieza a apoyar el P. Bohuytrón
11/91: Llega por
primera vez el P. Reinaldo Nann desde Lima. Se despide la Hna Liberata.
1994: Viene por
primera vez el P. Jose Luis Correa como asesor nacional.
1998: Nace el grupo
“Madre”, primer grupo de matrimonios.
1999: Se consigue
el terreno en Covicorti
2000: mayo: inicio
de la construcción- septiembre: coronación – 8.12. Bendición
2002: JNF en
Trujillo. Llega el P. Reinaldo como párroco a La Esperanza. El 18 de octubre se
hace la primera “peregrinación anual” al
santuario.
2003: año del
rosario: se corona a la Mater como reina de la paz y unión familiar. Cientos de imágenes de la Mater
Peregrina son enviadas.
2004: construcción
del colegio
2010: Crisis en el
movimiento. Visitación canónica y nombramiento del P. Oscar Murillo
31.05.12: Coronación de la Mater como “reina de la unidad y
despertar de la familia”, después de casi
un año de preparación con capital de gracias. Como fruto nacen 4 grupos nuevos:
2 de señoras y 2 de matrimonios.
2013: El P. Reinaldo
asume nuevamente una parroquia en Trujillo y es nombrado coordinador diocesano.
Elementos
importantes:
1. La
Mater elige sus instrumentos (misioneros): Hubo respuesta de gran entrega y
fidelidad.
2. Familia
unida (desde los inicios y nuevamente después de la crisis)
3. El
santuario es un lugar cálido, de paz y cobijamiento que transforma a las
personas.
4. La
Mater es victoriosa: vence todos los obstáculos
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